Bad boys, bad boys whatcha gonna do whatcha gonna do? (Slade Wilson)

El trabajo era algo que no podía dejarlo aunque quisiera, pues de cierta manera es el único método que tengo para modo de ganar dinero lógicamente. Mi trabajo no era como una persona normal lo tiene, pues tener que matar a cualquier tipo de persona a cambio de dinero no es algo que esté bien en si pero yo no mato a cualquiera, pues las personas que normalmente les quito la vida son personas que han hecho cosas demasiado horribles. Ya he visto la mayoría de las cosas que este mundo puede ofrecer de lo peor de las personas, pues ha de todo tipo hasta violadores, drogadictos, pederastas, etc. Los que más me molestaban eran aquellas personas tan corruptas que podían hacer el mal en todo una ciudad, yo la verdad eso nunca lo he visto bien, es por eso que siempre investigo primero a mis objetivos antes de poder clavar una bala en su maldito cráneo sin fallar.

La noche anterior había recibido una llamada de mi contacto que siempre me da todas las misiones, la tercera persona de quien estoy hablando es Amanda Waller, aunque ya me ha repetido varias veces que no tengo que hablar mucho acerca de ella cuando estoy en público pues el trabajo que hace no es nada bonito e incluso me puedo meter en problemas pero eso es algo que a mi la verdad no me importa. Nunca me ha dado miedo por el hecho de con quien me estoy metiendo, siempre le he buscado una salida a las cosas y además siempre me he salido con la mía, viendo todas las opciones posibles para modo de que mi objetivo siempre sea cumplido.

La misión que tenía ahora me llevó hasta la ciudad de Nueva York, había salido temprano en la mañana pues fueron unas largas horas de viaje en mi vehículo. No me había dado tiempo de avisarle a Harley que iría a Nueva York pero de igual manera no pensaba quedarme mucho tiempo ahí pues solamente fui por una misión que tenía que cumplir. Waller ya me había dado todos los ingresos que me había prometido, pues algo que siempre le he dicho es que lo primero es la paga y después la misión ya que Amanda Waller no es una persona en la que se pueda confiar.

Traía todo el equipo necesario para esta misión, tenía que eliminar a la mano derecha de un sujeto llamado ¨Sebastian Blood¨ quien era una persona muy importante y reconocida en la ciudad  de Chicago. Al llegar a la ciudad tuve que buscar algún hotel en donde quedarme y poner todo mi armamento discretamente por lo que no me frustré mucho en buscar algún hotel de cinco estrellas, fui hacia el primero que vi. Llegué a la recepción dejando el auto en el estacionamiento y pidiendo un cuarto y un ayudante del hotel me llevó todas las maletas hacia mi habitación - Pesan un poco - murmuró riendo - Solo es ropa... - respondí aunque claro que no todo lo que había en las maletas era ropa. Al llegar a la habitación el sujeto dejó las maletas en el suelo, le di las gracias y cerró la puerta. En eso enseguida la ver que se fue me quité la ropa de civil para abrir las maletas y ponerme la armadura junto con el casco. Activé la visión roja, poniéndome también las armas en mis muñecas y poniéndome una AK-47 colgando en mi espalda. Agarré demás cosas que me hicieran falta y después salí por la ventana buscando la escalera de incendios. Salté hacia el otro edificio que estaba al lado, la suerte que tenía es que al edificio que tenía que llegar hasta a unas cuantas calles nada más por la dirección que me había mandado Waller.

Seguí saltando de tejado en tejado hasta que por fin pude llegar hasta el edificio de mi objetivo. Estando en la azotea saqué el gancho y lo sujeté bien, poniéndolo en un ductor de ventilación para modo de que se sujetara bien. Cuando veo que la cuerda del gancho está lista me lo pongo en la cintura y me voy deslizando por los costados del edificio hasta llegar a la ventana de donde estaba la oficina de mi objetivo - ¡Todos ustedes están en mi lista! - grité y quitándome le gancho rápido  agarré el Ak-47 de mi espalda y comencé a matar a los hombres que lo resguardaban.