Do you only a party? - Natasha Romanova

Estos últimos días en la ciudad habían sido un poco pesados, el hecho de que ahora los mafiosos de la ciudad tenían miedo de lo que podía hacer el vigilante nocturno me daba una buena sensación de boca, ¿porque? Porque así ahora todos los criminales tienen a alguien que temer por las noches que no sea simplemente la policía. Mis días como el caballero de la noche apenas estaban comenzando, pero la policía aún así no estaba de acuerdo con lo que hacia por la ciudad, tanto que hasta en los periódicos solamente Batman era visto como un mito de las calles de la ciudad, pero el hecho es que ese mito pocos sabían que era verdad, tanto como los criminales y yo sabíamos eso. La noche anterior me había tocado infiltrarme en una disco llena de gente corrupta, llegando con una explosión y en busca de respuesta, lo único que me tope es con un sujeto que me había dicho que dos mafias estaban en guerra, la mafia de Carmine Falcone y la mafia de Salvatore Maroni, dos capos importantes del mundo criminal de Los Angeles.

Esta tarde que estaba libre me había tomado la libertad de investigar un poco más de ellos en la Batcueva, tanto que Alfred me había ayudado a buscar sus archivos del Departamento de Policía hackeandolo - Vaya historial que tienen - murmuré mientras los estaba leyendo en la pantalla de la Batcomputadora - Son criminales desde una edad bastante temprana, tiene que tener cuidado, amo Bruce - me dice Alfred estando a mi lado. Lo que más tenía que tener es cuidado, estos capos son peligrosos y tienen mucho dinero como para contratar a algún mercenario para matar a Batman, ya que les había dejado un pequeño mensaje en aquella disco a la que me había infiltrado. Cerré los expedientes al leer el de los dos sujetos y después me puse de pie - No son más que dos hombres con indiferencia que andan peleando por varios territorios de la ciudad, pero aún así son peligrosos - le digo a Alfred a lo que después el me hace una señal con la mano - Amo Bruce, revisé su agenda y esta noche tiene que ir a la ciudad de Nueva York. Tiene una fiesta privada hecha por Harvey Dent - miré la agenda y vi que era cierto - ¿El fiscal del distrito? ¿Como fue que pudo pagar una fiesta privada? - pregunté con curiosidad - No losé, señor. Tal vez recibió un aumento en su trabajo este mes - añadió Alfred mientras yo me acercaba a la salida de la Batcueva - Esta bien, iré para allá. ¿Tenemos el avión Wayne disponible? - le pregunté - Si, señor, lo iré a preparar para el viaje - me dijo a lo que después yo no dije nada más que susurrar un simple ¨gracias¨ mientras me acercaba hacia mi habitación para arreglarme.

Después de algunos minutos de aseo personal y de ponerme elegante para la fiesta que iba asistir en Nueva York, en una maleta guardé todo el equipo necesario con el traje del murciélago solamente para ser precavidos, no quiero que me agarre un problema en aquella ciudad y no tener nada de mi equipo, así que equipé solamente lo necesario junto con también el traje. Al ya estar listo con todo mi equipo y algunas maletas con ropa porque pensaba pasar algunos días en Nueva York después de la fiesta me fui en la limusina camino hacia mi avión privado lo cual solo duró algunos minutos hasta poder llegar al avión e ir camino hacia Nueva York.


Después de algunas pequeñas horas de viaje, el avión había aterrizado en una pista de aterrizaje también privada que en el pasado había comprado, ya antes había estado en Nueva York y había comprado algunas propiedades que me pueden servir en un futuro ya que visito mucha aquella ciudad. Al salir otra limusina apareció y Alfred se llevó el equipaje - Hemos llegado - murmuré y después me metí en el vehículo. Alfred y yo fuimos hacia el mejor hotel que hubiera en la ciudad, uno de cinco estrellas para dormir bien solamente que el iba a tener su habitación y yo iba a tener la mía. Al llegar al hotel el se llevó el equipaje junto con otro chico que trabajaba ahí, me acerqué a la recepción y pedí dos cuartos que estuvieran juntos. Subimos hacia los cuartos y dejé las maletas en el suelo, al ver la hora pude notar que ya era de la fiesta por lo cual solamente dejé el equipaje en la habitación y con la misma salí solamente con la maleta donde tenía el equipo del murciélago. Alfred y yo fuimos hacia la limusina nuevamente ahora con destino a la fiesta.

La zona donde era la fiesta era en verdad bastante elegante, era en un edifico elegante y de tan solo verlo desde afuera puedo apostar que por dentro es bastante elegante también. Salí de la limusina dejando la maleta de mi equipo en el vehículo con Alfred y enseguida que salí varios fotógrafos me lanzaron con sus flashes - ¡Es Bruce Wayne! - gritó uno de los fotógrafos mientras sacaba sus fotos - Buenas noches - dije mientras los saludaba con la mano mientras caminaba hacia adentro del lugar. Antes de entrar un hombre moreno me pidió mi pase de entrada por lo cual se lo dí y seguí mi camino. Entré y pude ver que en verdad era elegante, enserio que Harvey se había lucido en hacer esta fiesta aunque todavía tenía mis dudas de como pudo haber pagado una fiesta privada así en otra ciudad que no fuera Los Angeles. Me detuve en lo que parecía ser la pista de baile, buscando con la mirada a Harvey para saludarlo pero por ahora no lo había visto - ¿Una copa, señor Wayne? - me pregunta uno de los meseros mientras tiene un plato con copas en su mano derecha - Si, gracias - dije y después la tome bebiéndola después. La bebida era champagne y tenía muy buen sabor. Lo único que hice es quedarme ahí parado buscando con la mirada alguna cara conocida, ahora mismo me estaba dando cuenta que eran puras amistades de Harvey aunque no los conocía a algunos.

Las cosas que estaban pasando en la ciudad de Los Angeles las había dejado a un lado solamente para poder asistir a esta fiesta de mi querido amigo Harvey Dent, sigo pensando en como pudo haber pagado esta fiesta pues Harvey no era una persona muy conocida por tener mucho dinero, el solo era el fiscal de la ciudad de Los Angeles, ya varias veces lo había visto e incluso el había estado hablando del vigilante conocido como ¨Batman¨. Lo conocía tan bien que Harvey siempre fabricaba su suerte, siempre traía consigo una moneda con la cual tenía dos caras, ya varias veces lo había visto como hacia aquel truco suyo que tanto lo identifica. Alfred se había perdido entre la gente que estaba en la fiesta, el de igual manera ya sabía que si algún problema surgía en la fiesta el tenía que avisarme y ya veré que ocupo el traje del murciélago, aunque en una fiesta así dudo que lo fuera a ocupar, lo había traído nada más por precaución no porque algo aquí me oliera mal.
No se porque me había quedado en la pista de baile, pues yo no era una persona que le gustara mucho bailar aunque de igual manera tengo conocimientos acerca del baile.

El ambiente era bueno, pues había gente de dinero pero aún así era gente educada y hasta ahora no había visto gente que presumiera todo el dinero que tenga debido a que sus padres se lo den. Yo soy una persona que es consciente que todo el dinero que tengo se lo debo a mis padres, pues si no fuera por ellos no estaría donde estoy ahora y además en el pasado he ocupado una parte del dinero para estudiar varias carreras en la universidad y así ser una persona con bastante conocimientos de muchas cosas. No solo eso había hecho, hubo un tiempo que me fui a Europa a aprender todo tipo de artes marciales posibles, mi entrenamiento para convertirme en lo que seré en un futuro fue una dura etapa pero aún así no me quejo en lo más mínimo, todo en esta vida es complicado y no se logra nada si no luchas por ello.

Por el momento solamente quería mantenerme con la personalidad de Bruce Wayne, pues si bien hasta ahora solamente estaba actuando un poco serio es porque estaba viendo el ambiente de la fiesta. En eso escuché como se puso una canción algo lenta, una canción que para ser sincero era algo de mi agrado pues no era de ese tipo de canciones que va todo rápido. Le di un sorbo a la bebida que había agarrado recientemente. En eso escuché a lo cerca como alguien se estaba acercando, enseguida voltee y me di cuenta que era un rostro familiar del pasado... - Lo mismo digo, Natasha - le digo mientras le veo unos segundos algo serio pero después di una leve sonrisa - Tengo conocimientos - hablé cuando había hecho mención sobre la pista de baile. Esta vez más deje una sonrisa más amplia salir - Entonces aprovechando que ya estamos aquí... ¿Te gustaría bailar? - le pregunté amablemente mientras ponía la bebida en una mesa cerca y después extendí mi mano para modo de que me diera la suya y así llevarla más hacia dentro de la pista de baile.

La fiesta todavía seguía o para ser más exacto estaba comenzando apenas, varias personas ya estaban en la pista de baile mientras que otras estaban ahí sentadas en las mesas comiendo lo que los camareros traían desde la cocina, la comida de verdad que se veía deliciosa, todavía me sigo preguntando como Harvey pudo haber pagado esta fiesta pues estaba bien organizada y además parecía ser que había gente de dinero, enseguida pude reconocer a uno que otro sujeto que también era millonario como yo, aunque con algunos no había tenido todavía el placer de hacer negocios con ellos. Varias empresas bien que podían ser el rival de la mía pero aún así yo nunca fui una persona que le preocupara mucho eso, pues a mi lo único que me importaba era que mi empresa saliera adelante y seguir el legado que había construido mi familia por años. Mi padre no fue una persona que estuviera muy centrada en la empresa, es por eso que también yo decidí ser una persona con la cual se preocupe mucho de la empresa y de su estado.

La más reciente canción que habían puesto en el lugar estaba perfecta para hacer un baile lento, para ser sincero yo no era una persona que bailara mucho pero eso no quiere decir que no tenga algunos conocimientos acerca de como bailar. La canción era lenta y creo que para un momento como esos no se me ocurrió otra mejor idea que invitar a Natasha a bailar. Haberla encontrado en aquella fiesta de verdad que me había dejado sorprendido, además de que no la veía desde aquella vez en Budapest... Aquel encuentro que lo seguiré recordando hasta que me muera. La única persona que sabía lo que había ocurrido ahí era Alfred, ninguna otra persona en el mundo lo sabía.

Budapest sin duda había sido un lugar en donde pasaron varias cosas, o bueno más bien tendría que decir que fueron cosas que pase solamente con Natasha... Cosas que dudo se vuelvan a repetir en un futuro. Haber recordado aquella escena simplemente me dejó salir una sonrisa que no es muy común en mi, Natasha en serio que aveces era la causante de que hiciera cosas que no es muy común que las haga, ¿yo sonriendo? Espero que eso no lo haya visto Alfred por que de seguro que en cuanto volvamos a casa me va a recordar esto. La fui guiando hasta la pista de baile, donde al encontrar un hueco ella enseguida me abrazo y yo empecé el baile lento. La canción se podía escuchar por todo el lugar - Y dime... ¿Que andas haciendo por estos lugares? - le pregunté mientras estábamos bailando pues enserio que tenía cierta curiosidad saber que estaba haciendo en una fiesta de ese tipo - No me digas que de nuevo te andas metiendo en problemas... - le murmuré y solté una pequeña risa simple a la par que seguía dando pasos lentos en la pista de baile. En un momento así el DJ por alguna extraña razón decide cambiar la canción y ahora en vez de ser una lenta decide poner una canción... ¨Movida¨ por así decirlo - Uhm... ¿Sabes bailar de ese género? - le pregunté sonriendo.

La pregunta que le había hecho a Natasha siento que no me había gustado la respuesta, aunque si bien ya sabía que ella siempre ha ocultado alguno que otro secreto es obvio que también sigue en ese negocio de ser una chica que se anda metiendo en varias misiones secretas. Lo que había pasado en Budapest siento que es algo que nunca voy a olvidar y que muy en el fondo fue una experiencia que si me había gustado mucho, pasar tiempo con Natasha era simplemente algo... Hermoso y eso es algo que no es muy común que yo lo diga. Muy pocas personas sabían lo que había ocurrido ahí o por decirlo mejor... La única persona que supo lo que en verdad pasó en Budapest fue Alfred, quien es la única persona en que ahora confió y además el siempre ha sido el hombre quien me ha dado varios consejos sobre como llevar una doble vida.

Aquella canción que habían puesto en la pista de baile me había dejado un poco incomodo, aunque en cierto modo si se bailar distintos géneros musicales siento que ver a Bruce Wayne bailar no es mi estilo, hasta siento que Natasha no es de bailar ese tipo de cosas. Me quede apenado un poco al escuchar la música, no sabía que decir exactamente y tampoco tenía idea de si seguirle el baile o simplemente decirle que nos fueramos de la pista de baile y fueramos a la barra a tomar algo que creo que sería lo mejor.

Por ahora simplemente me quede ahí parado enfrente de ella, escuchando la música a todo volumen y viendo como las demás personas también ya estaban comenzando a bailar al ritmo de aquella canción. Di algunos pasos suaves para empezar a mover mis hombros al ritmo de la música aunque tampoco sin exagerar mucho, no quería dejar a Natasha con la boca abierta - Bailo varios tipos de género... Aunque este no sea mi estilo - respondí ante la pregunta que me había hecho y me le quede viendo - Pero... ¿Que tal si mejor vamos a beber algo? - pregunté para modo de salir de aquella pista de baile y no verme ridículo bailando ese tipo de música.